viernes, 19 de diciembre de 2008

Sobre lo mal que hemos interpretado nuestro pasado

Extracto de las Memorias del Lic. Gilberto Strombocci, descubiertas en su estudio por el Dr. Brasnislao Edenblescu, amigo personal del fallecido psicólogo.

Luego de mi abducción mi cerebro sintió como si volviese a nacer, como si recién se despertase de un largo sueño y así comenzó a recordar, a recordar cosas, hechos, que yo jamás había vivido, que jamás había escuchado ni leído en ningún lado. En un principio me sentí maravillado, luego abrumado, ya que la presión de tanto conocimiento que iba siendo “mostrado” a mi mente cada vez más rápido me dio dolor de cabeza durante seis días.

Cuando por fin mi mente quedó en silencio, en paz, fue cuando comencé a unir todos esos conocimientos que habían despertado en mi mente, inicié un estudio de bibliografía comparada pero todo dentro de mi cerebro, con los datos que en mi memoria habían implantado mis captores.

Es imposible plasmar todo por escrito, a una sola persona podría llevarle toda la vida apenas asentar un mínimo por ciento de lo que hay dentro de mi mente. Pero lo que me ha hecho sentirme apenas una mota de polvo pisada por un gigante, fueron una serie de datos, mucha información que contradice fuertemente la noción que nosotros como género humano tenemos de nuestro pasado.

No de nuestra historia, que si bien fue plasmada por escrito por personas subjetivas, hay algo de verdad en ella. Pero más allá, el estudio del pasado prehistórico, la noción que tenemos del origen del género humano, de nuestros antepasados homínidos, incluso los conocimientos de la paleontología, la geología, todo, todo eso es erróneo.

Nuestros mejores científicos descubrieron centenares, miles de fósiles, e interpretaron cómo habría sido su vida, cómo habría sido la relación evolutiva entre unos y otros. Pero mis captores vienen siguiendo nuestra historia, la evolución de nuestro planeta entero, desde sus inicios. Y de la misma forma que antes hablaba de nuestra historia escrita, ellos podrán tener su visión subjetiva de lo que ocurrió en nuestro mundo, pero es una visión de primera mano.

Esa visión ahora está en mi mente. Es insoportable saber lo mal que hemos interpretado nuestro pasado, hay tanto por decir, tanto por corregir… habría miles y miles de cambios, centenares de científicos caerían en el descrédito por haber asumido cosas que a la luz de lo que ahora sé son tan infantiles y ingenuas.

Asumo que mis captores han querido que yo difundiese todo lo que han insertado en mi memoria, pero no puedo. Nuestro mundo, nuestra sociedad, ha crecido y sigue evolucionando gracias a nuestro entendimiento del pasado. ¿Cuántos paleontólogos, antropólogos, arqueólogos, etc darían su vida por ir al pasado y ver si sus teorías son correctas? ¿Cuántos de ellos darían su vida por saber lo que yo sé? Pero sé que ninguno de ellos estaría conforme con el conocimiento que me fue dado.

No puedo. Simplemente no puedo.

(El licenciado Gilberto Strombocci desapareció de su hogar hace dieciocho años y su cuaderno de memorias quedó abierto en esta última página sobre el escritorio. El doctor Branislao Edenblescu recién ahora ha publicado extractos del diario del famoso psicólogo, siendo esta página la más aterradora, incluso más que el relato de su rapto por parte de seres de otro mundo)

(El autor real de esta ficción es Martín Cagliani)

1 comentario: